Por un par de razones.
Primero, los humanos han evolucionado para amar la carne porque (en términos generales) la carne proporciona mucha más energía libra por libra que las plantas comestibles. Algunos biólogos evolucionistas creen que el aumento del consumo de carne en los primeros humanos jugó un papel clave para ayudarnos a desarrollar nuestros cerebros grandes y poderosos. Si los órganos humanos se convirtieran en autos analógicos, tu cerebro sería el súper auto que consume mucha gasolina. Los cerebros humanos requieren enormes cantidades de energía, y la carne es una fuente de alimentos ricos en energía.
En segundo lugar, los estadounidenses viven específicamente en una tierra y un tiempo de abundancia. Estados Unidos es un país rico con una economía sólida, incluso con la reciente recesión. Lo cual es bueno porque la ganadería es un negocio costoso.
Entonces, ¿por qué los estadounidenses comen tanta carne? Primero, porque los humanos ya están condicionados por la evolución para consumir tanta carne como sea posible. Y segundo, porque podemos, literalmente, permitirnos.