Los aceites de coco y palma son mezclas naturales de varios triglicéridos. Cada triglicérido se compone de tres ácidos grasos que se han esterificado con glicerina (también llamada glicerol).
La hidrólisis de los triglicéridos originales rompe el enlace éster y produce ácidos grasos y glicerina. Para identificar este producto como diferente de la glicerina producida a partir de grasas y aceites de origen animal, se llama glicerina vegetal.