El agua no suministra energía, a menos que se mezcle con glucosa o algo así. Más bien, ayuda a digerir los alimentos y a extraer energía.
La sensación fisiológica puede ser diferente. Una persona cansada puede sentirse fresca y llena de energía después de beber suficiente agua. Pero en realidad ayuda a los sistemas digestivos y otros órganos del cuerpo a suministrar energía.
Obtenemos energía oxidando la comida. El agua no se puede oxidar, por lo que no puede ser una fuente de energía.