La pintura de hoy podría no ser tan tóxica como las viejas pinturas a base de plomo de hace 50 a 75 años. Eran ciertamente venenosos. La otra razón por la que constituían un peligro especial adicional es que los compuestos químicos principales por algún motivo curioso tienen un sabor dulce. Los niños pequeños probarían las astillas de pintura descascarada y descubrirían que sabía a “caramelos”. Es por eso que era tan peligroso ser utilizado en el interior y al aire libre en ese momento.
Los antiguos romanos usaban un compuesto de plomo “azúcar de plomo” (acetato de plomo) para endulzar su vino rojo amargo barato. Los antiguos romanos no tenían azúcar refinada. La miel era su única sustancia dulce. Este azúcar de plomo en el vino era una mezcla muy venenosa. La famosa intoxicación por plomo de los romanos se vio agravada por el uso de tuberías de acueducto de plomo, contenedores de alimentos y otros artículos para beber.