A comienzos del siglo XXI, los científicos agrícolas enfrentaron su mayor desafío: uno de intensificar la producción agrícola sin dañar el medio ambiente, mientras que al mismo tiempo protegían o mejoraban la base de recursos y los servicios del ecosistema. Es entonces cuando el concepto de intensificación de las prácticas agrícolas ecológicamente racionales basada en la Agricultura de Conservación (CA) comenzó a considerarse seriamente como un método mejorado y sostenible para la agricultura de la Revolución Verde (GR). En la actualidad, se considera que la intensificación de los enfoques ecológicos basados en CA es la opción más adecuada para los trópicos y subtrópicos.
La agricultura orgánica es una forma de agricultura ecológica. Es posible optar por la agricultura 100% orgánica en áreas de nicho para la producción de ciertos cultivos agrícolas: vegetales, frutas de certai, verduras, etc. Para la producción de cereales a gran escala (arroz, maíz, trigo, soja, etc.), es difícil ir a la agricultura 100% orgánica. Esto se debe a que es difícil para los granjeros obtener las grandes cantidades de nutrientes orgánicos requeridos para tal cultivo de granos. Aquí, podemos apuntar a la producción de granos sin pesticidas adoptando las prácticas de manejo integrado de plagas (MIP) para el control de plagas y utilizando el manejo de nutrientes específico del sitio (SSNM) para la aplicación judicial y equilibrada de nutrientes requeridos tanto orgánicos como inorgánicos (fertilizante ) fuentes de nutrientes.