“¿Las vacas temen a la oscuridad?”
No, no lo son, pero le temen a algunas de las cosas que la oscuridad oculta, a saber, los depredadores. Donde hay luces, pueden ver mejor, como nosotros también. Las luces les permiten ver a los depredadores acercándose desde el viento.
En ausencia de luces buscan refugio en graneros o en rodales de árboles o arbustos, para ocultarse visualmente.
Sin embargo, de manera realista, el ganado actúa por instinto, no por miedo. No temen a los posibles peligros, porque en lo que respecta a la inteligencia, una manada de ganado puede ser una caja de rocas. Si bien pueden estar más alertas por la noche, el miedo solo viene con la presencia de una amenaza directa.