Si está considerando beber agua de la piscina, se encuentra en una situación de emergencia y “asco” deja de ser una preocupación. Una pequeña cantidad de químicos o las bacterias muertas (ahora tratadas con cloro y completamente muertas) de la caca de los niños del vecino son menos peligrosas para la salud que la deshidratación.
La función del cloro es matar cosas biológicas, como bacterias y virus, y hace un trabajo realmente bueno. En combinación con la luz ultravioleta del implacable sol, no es probable que haya muchos virus al acecho, e incluso el recuento de bacterias será muy bajo. Hay tanto cloro en el agua de la piscina (asumiendo que se trata de una piscina bien mantenida, no una abandonada), se puede usar para hacer que otra agua sea segura para beber. Mezcle el agua de la piscina con agua filtrada de otra fuente (río, lago, lluvia) a una proporción de 1: 2, y listo, tiene agua potable con menos cloro. Hay tanta agua en una piscina que tendría que agregar galones de productos químicos para registrarse. Compare esto con los millones de personas que beben agua de ríos y lagos todos los días, lo que incluye aproximadamente el 99.99% de todos sus antepasados. Tu cuerpo está diseñado para manejar mucho peor.
Si estás realmente paranoico, haz que hierva por completo durante unos segundos, o lleva el agua a 165 Fahrenheit por un par de horas, y todo ser viviente en el agua estará muerto e inofensivo. Esa vieja doctrina del boy scout acerca de hervir durante cinco minutos es anterior a los microscopios electrónicos.
