El costo del vino es básicamente fijo, alrededor de $ 3.50 por botella. La producción de vino para cualquier viña también es fija. Hacen todo lo que permiten el clima y la tierra, y no pueden hacer más hasta que la uva vuelva a crecer (lo que probablemente sea otra cosecha y por lo tanto un producto diferente).
Entonces, el vino tiene el mayor precio al por mayor que el viticultor cree que puede cobrar mientras vende todo lo que tiene que vender. Eso se ajusta cuando el mayorista ve el mercado y establece su precio lo más alto posible. Y ajustado de nuevo en el nivel minorista.
Entonces, el precio de cualquier botella de vino está determinado por un suministro fijo y una demanda flexible. Lo que lleva a precios muy variables según la cantidad de botellas que se producen y la cantidad de personas dispuestas a pagar por ellas.
