Muchas semillas requieren solo agua para desencadenar la germinación. Otros requieren exposición al frío (vernalización), luz o ciertas longitudes de oscuridad y luz alternas (fotoperiodo). Aún otros necesitan ser raspados en superficies ásperas (escarificación), o pasar por el tracto digestivo de los animales. Hay semillas que solo germinarán después de estar en un incendio.
Todas las semillas requieren agua, oxígeno y una temperatura adecuada.
(Dato interesante: cuando se buscaba ‘semillas de lijado’ en Google, una cantidad desproporcionada de resultados se refería a la germinación de semillas de cannabis )