Porque el plástico que entra en las botellas requiere aceite del suelo y mucha energía para crear. El agua que entra en las botellas se bombea desde el suelo, a velocidades que son órdenes de magnitud más altas que las que se obtendrían simplemente por los hogares que viven en el área. El agua en las botellas tendría que ser transportada en camiones al destino (tiendas), usando combustible diesel y otros recursos no renovables. Tendría que usar gasolina para ir a la tienda a comprar esa botella de agua. La botella, después de haber sido utilizada solo una vez, terminaría siendo desechada de una de las tres maneras
- Reciclado: esto significa que se recoge y se transporta en camión (más gasolina) a una instalación que lo derrite y crea algo más (más energía).
- arrojado a la basura: esto significa que debe ser recogido y transportado en camión a un vertedero donde será enterrado por “eternidad”, que en realidad puede no ser la eternidad, en función del tipo de plástico utilizado.
- tirado: donde se convierte en parte de la basura que encontramos en zanjas, bosques y en enormes parcelas que flotan en los océanos. esto significa que la vida silvestre puede ahogarse, ya que se descompone en micropartículas de plástico, es ingerido por los animales y puede bloquear su tracto digestivo, matándolos.
O, para la inmensa mayoría de las personas que usan estas botellas de agua, podrían llevar un vaso al grifo más cercano y llenarlo. O bien, podrían usar una botella de agua rellenable, llenarla desde casa y traerla consigo. Casi no existen circunstancias, para la mayoría de nosotros, cuando absolutamente, no podemos vivir sin ellas, moriremos a menos que las obtengamos, necesitamos agua de una botella de un solo uso.
Para situaciones de alivio de desastres y para situaciones en las que una población no tiene acceso al agua potable, sí sirven una solución temporal útil, pero solo son temporales.