¿Por qué el uso de pesticidas se considera un dilema para los agricultores?

Hay dos razones obvias por las cuales el uso de pesticidas sería visto como un dilema para un agricultor. Uno es obvio, eso es costo. Una parte del costo es la mano de obra, el combustible y la sustancia química real que debe comprarse y aplicarse. A continuación, cuesta dinero, tiempo y mano de obra utilizarlos, y estos recursos podrían aplicarse a otras actividades en las que podrían beneficiar más al agricultor.

Un problema más sutil con estos es la forma en que interactúan con la biología del campo. Por un lado, el uso de cualquier protocolo de control químico sobre plagas o malezas contribuye a desarrollar especies de malezas o insectos resistentes al producto que solo serán más difíciles de controlar en los próximos años. Otro problema es que los productos químicos son indiscriminados en cuanto a sus efectos. La misma toxina que mata gusanos del ejército mata insectos beneficiosos como abejas, avispas y arañas, que tienen un nicho en la ecología del campo. Se pueden dañar otros organismos en el suelo que desempeñan un papel en mantener el suelo saludable, y por lo tanto, la cura puede ser perjudicial para la causa.

Los productos químicos son (considerados) seguros y efectivos en el uso siempre que el entrenamiento y el uso adecuados se consideren primordiales en la aplicación, pero no son la solución perfecta para muchos de los problemas que enfrentan los agricultores. Cabe señalar que existe una creciente comunidad de consumidores que son muy escépticos sobre el uso de productos químicos agrícolas, lo que ha contribuido en gran medida al éxito de la producción orgánica en varias naciones del mundo.

El uso de pesticidas se considera un dilema para los agricultores porque los pesticidas hacen más daño al suelo y a los cultivos que bien. Los pesticidas es un producto químico creado por el hombre que se utiliza para controlar la infestación de plagas en la granja o durante las temporadas posteriores a la cosecha. Los pesticidas están diseñados específicamente para matar organismos, organismos considerados por muchos agricultores y la industria de los plaguicidas como un anatema para una agricultura mejor y más abundante. Algunos de los efectos secundarios nocivos en organismos no objetivo (personas, animales, suelo, agua, etc.), el resurgimiento de las poblaciones de plagas (porque el control natural se interrumpe), el desarrollo de resistencia, el costo al que deben comprarse estos productos químicos etc. El agricultor y la familia son los más expuestos porque manejan los productos químicos, el consumidor y el medio ambiente.