Es muy popular en Europa del Este y Central, en su forma más pura, así como en muchas variaciones diferentes. Sus valores de salud son de particular importancia en el clima de esos países, aunque los antiguos egipcios y romanos ya conocían sus propiedades.
Es una planta baja en calorías que tiene una gran cantidad de vitaminas (A, B, C, E y K), así como magnesio, potasio, calcio y hierro.
¡Tiene el doble de ácido ascórbico (vitamina C) que un limón!
El azufre es responsable del sabor fuerte, y eso le otorga fuertes propiedades antifúngicas y antibacterianas. También está impulsando el sistema inmune. Contiene sustancias anti-fiebre también. Por lo tanto, es una excelente adición a los tratamientos de frío y no solo porque puede desbloquear los senos paranasales 😉
Por supuesto, no es bueno exagerar, especialmente si tienes el estómago o los riñones débiles, demasiado puede irritarlos.
Pero en general es una adición atesorada en la cocina, especialmente con carnes.
¿Preferirías comer o beber tu dinero?
¿Qué piensas sobre la etiqueta occidental de la hora de la comida?
¿Por qué algunas personas que consumen carne no quieren ver un animal siendo sacrificado?
No puedo imaginar mi cocina sin eso.
Raíz de rábano picante Por Anna reg (Trabajo propio) [GFDL o CC BY-SA 3.0], a través de Wikimedia Commons