Siempre tengo ganas de dormirme tan pronto como tenga mi comida. Planeo mucho antes de comer, pero tan pronto como tengo mi comida, pierdo mi motivación por completo. El ritmo se echa a perder también. ¿Por qué es esto?

Cuando comes alimentos, tu flujo sanguíneo se dirige a tu intestino para ayudar con la digestión. La digestión necesita suministro de sangre a la pared intestinal para la contracción y la liberación de enzimas digestivas.

Esto disminuye el flujo sanguíneo a otros órganos, como el cerebro y la periferia. Cuanto más grasosa es la comida que tomas, más intensamente tu intestino tendrá que trabajar para digerirla. El más somnoliento se sentirá después de comer alimentos ricos en grasa o después de atracones. Además, debe haber notado que se siente frío después de comer, la misma razón, flujo de sangre dirigido al intestino, periferias – sangre menor – se siente más frío. Dado que la circulación sanguínea mantiene el cuerpo caliente.

El sistema parasimpático, llamado sistema de reposo y digestión, es responsable de esto. Es parte del sistema nervioso autónomo del cuerpo que no controla, a diferencia del sistema nervioso periférico, nuestros músculos esqueléticos, que podemos controlar.