Ya no. La modificación genética por cruzamiento intenso ha producido una planta que no puede reproducirse por semilla. Solo quedan las semillas vestigiales.
El plátano (una planta, no un árbol) produce rizomas de la planta “madre”, de los cuales los brotes (“retoños”) se eliminan y crecen como la próxima generación. Esto reduce la diversidad genética y aumenta la vulnerabilidad de la planta a enfermedades, especialmente enfermedades fúngicas. En la actualidad, la mayoría de los bananos comerciales son de la variedad “Cavendish”, pero los países productores (en su mayoría islas) están plagados de varias enfermedades fúngicas que pueden acabar con el conocido Cavendish. Se está trabajando mucho para descubrir variedades resistentes a los hongos.
Esta es la banana original:
