Haga las preguntas correctas. Permítale aceptar la idea orgánicamente.
“¿Saliste el dia de hoy?” “¿Qué tal la escuela?” “¿Qué has leído o visto últimamente?”. En definitiva, preguntas que requieren que piense sobre los efectos de un trastorno de la alimentación: aislamiento, disminución de la fuerza física, aumento de la ansiedad, falta de concentración; pero no agregue vergüenza a sus decisiones. (Probablemente ya esté experimentando suficiente de eso)
Necesitas ser solidario, pero no presionarla para que coma. Sé alentador, pero no habilitante. Refuerce sus cualidades positivas.
Tenga en cuenta que es una enfermedad mental que afecta al cerebro. Entrevisté a varias personas que dijeron que recibirían ayuda si afectaba su vida, y al siguiente dijeron que estaban cansados de vivir de esa manera.
Asegúrate de mantenerte saludable también, puede ser agotador para un amigo también. Si necesita más ayuda o ideas de cosas que decir, visite la Asociación Nacional de Trastornos de la Alimentación, o llame gratis al 1 (800) .931.2273.
