Después de un rato bajo la ardiente luz del sol, es probable que tengas sed. Afortunadamente, estás en la playa. Todo lo que tienes que hacer es dirigirte al océano para llenar un vaso con agua fresca y saciante del mar, ¿no?
¡Por supuesto no! Si alguna vez nadó en el océano, sabe que el agua es salada y no tiene buen sabor. El sabor salado del agua del océano no es la razón principal por la que los seres humanos no bebemos agua salada. Hay una razón científica importante por la que necesitamos beber agua dulce en lugar de agua salada para mantenernos saludables.
Más del 70% de la superficie de la Tierra está cubierta de agua. La mayor parte de esa agua, sin embargo, es agua salada no potable. El hecho de que no podamos beber agua salada puede parecer extraño si tenemos en cuenta que nuestros cuerpos necesitan agua y sal para funcionar.
El problema con el agua salada es la cantidad de sal que contiene. Nuestros cuerpos solo necesitan una pequeña cantidad de sal. Cuando tomamos demasiada sal, nuestros riñones deben eliminar el exceso de sal a través de nuestra orina.
La sangre humana tiene una salinidad de 9, lo que significa que hay 9 gramos de sal y 991 gramos de agua en cada 1.000 gramos de líquido. El agua salada se considera un fluido hipertónico, lo que significa que contiene más sal que la sangre humana. De hecho, el agua salada tiene una salinidad de 35, aproximadamente cuatro veces la salinidad de la sangre.
Nuestros riñones son los filtros que separan el material de desecho en la sangre y estos residuos se almacenan en forma de orina en la vejiga, listos para ser expulsados del cuerpo. Un riñón no puede producir orina a partir de una concentración de sales de más del 2%. El agua de mar se compone de aproximadamente 3% de sal, por lo que si la tomamos para saciar nuestra sed, los riñones deben usar agua existente de nuestro cuerpo para diluir la sal extra, lo que a su vez nos hace sentir aún más sedientos.
Además de agotar el suministro de agua de su cuerpo, beber agua salada también puede provocar calambres musculares, náuseas y presión arterial alta. Si continuaras bebiendo agua salada en vez de agua dulce, eventualmente experimentarías efectos aún peores, como fallas de órganos, coma e incluso la muerte. Espero que ahora sepas por qué no debemos beber agua de mar.
Gracias por A2A
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