Porque la UE está sobrerregulada. Bruselas también dice, por ejemplo, cuánto tiempo debería ser el tallo de una rosa cuando quieres venderlo. O qué tan grande debe ser un kiwi si quieres importarlo. Aquí hay otro: limitación en el uso del globo. Según las normas de la UE de 1988, los niños menores de 8 años no pueden usar globos de látex sin un padre supervisor. O bien, los “whistle blowers”, que se desplazan en una lengua larga de papel de colores cuando sonaron, ahora han sido clasificados como inseguros para todos los niños menores de 14 años.
En otras palabras, la UE no es sostenible. Brexit es solo el comienzo. Más salidas de país seguirán.