¿Por qué nos gusta comer cosas que se neutralizan entre sí? (Por ejemplo, palomitas de maíz con palomitas de caramelo)

La respuesta fácil es que no se neutralizan entre sí.

Si te dan palomitas de caramelo salado, todavía saboreas el caramelo, pero con un poco de sal y un poco menos de dulzura.