Tradicionalmente, el queso se elabora con leche de vaca, de cabra o de oveja, que son productos de origen animal. Como los veganos no consumen ningún producto animal, el queso lácteo definitivamente no es vegano.
Sin embargo, con el crecimiento de la población vegana y las expansiones en las artes culinarias y las ciencias, hay quesos veganos que se han desarrollado. Al usar el término “queso vegano”, reconozco que esto puede ofender a algunos amantes de los quesos lácteos. El tipo de queso vegano al que me refiero no es a base de aceite o soya, como suele serlo la mayoría de los veganos comerciales convencionales, sino a un producto que se elabora mediante un proceso de fermentación similar utilizando cultivos de queso (como penicillium roqueforti para queso azul, pencillium candida para camembert, etc.) y con frecuencia cultivos lactobacílicos. Los moldes en realidad crecen en anacardos, almendras y otras nueces debido a las estructuras de proteínas y grasas, y tienen una textura y sabor similares al queso lácteo.
Aquí hay un ejemplo: Camembert madurado con ceniza vegana: lleno de plantas
Entonces, para resumir: ¡depende de tu definición de “queso”! 🙂