No hay comida especial que tengas que comer para volar combatientes. Cada piloto comió lo que quería. O quizás no comiera nada antes de volar.
Todos teníamos esa “salud animal grosera” típica de la mayoría de los 20 y 30 años de edad. Podría haber comido rocas y habría volado bien. Ahhhh. La facilidad de la juventud!