La indignación por el comercio de carne de perro proviene de (1) el tratamiento inimaginablemente cruel y la matanza de perros criados para carne en China, Corea, Vietnam y otros países asiáticos, y (2) la relación especial y única que los perros han ocupado en nuestras vidas durante milenios
Los perros no fueron domesticados por los humanos como un animal de ganado. Por el contrario, los perros evolucionaron conjuntamente con seres humanos hace unos 30,000 años y están genéticamente programados para hacerse amigos, protegernos y servirnos. Hoy en día, los perros son fieles acompañantes de cientos de millones de personas en todo el mundo, sin mencionar su papel increíblemente vital como animales de servicio para ciegos, sordos, discapacitados y en la realización de misiones salvavidas para militares y policías. Recomiendo la serie NOVA “Perros decodificados” para una mirada esclarecedora de la relación íntima y esencial entre los perros y la humanidad. Cuando ha experimentado el amor inmenso, la lealtad y la alegría que un perro aporta a la vida de una persona, es muy difícil entender por qué alguien elegiría comerse un perro, en lugar de hacerse amigo de él.
Pero incluso si su cultura no considera a los perros como una especie de compañía, ningún animal (ni vacas, cerdos, gallinas, gatos, perros, etc.) debe ser sometido a torturas y matanzas bárbaras para el plato de alguien. Los videos de perros que son criados, transportados y sacrificados brutalmente son espantosos e inexcusables. De ahí la indignación global por el comercio de carne de perro asiática.