Algunas aves siempre picotean en el suelo en busca de un bocado como gusanos, lombrices o insectos. Peck, peck oh ¡tuve suerte!
Los comedores de semillas saben cuándo y dónde hay semilla madura: he visto palomas tortuguinas sentadas balanceándose sobre un girasol y comiendo las semillas maduras. También saben que la semilla cae al suelo y que si encuentran una semilla en el suelo volverán a buscar más en esa área. Las aves observarán actividades en su jardín. Saben cuándo se activan los rociadores y cuándo el gato está durmiendo la siesta. También te observan y rápidamente establecen una conexión entre tú y la semilla que encontraron en tus pistas.
¡Y se alertan mutuamente! Entonces, o los pájaros te vieron “escondiendo” semillas en el suelo o escucharon a un pajarito susurrar tu secreto 😉