Hmmm … Este es un problema complejo. Después de asistir a varias convenciones de café y ver los productos de varias compañías de fabricación de vainas, parece una combinación de tres factores principales: la tecnología del material (y su rendimiento), la disponibilidad del mismo y la infraestructura para el impacto / propósito.
La tecnología de empaques biodegradables y compostables, aunque definitivamente disponible, todavía se está perfeccionando para el rendimiento. Satisfacer los requisitos de las demandas del mercado no es una hazaña fácil, especialmente cuando no se invierte mucho dinero en I + D (DuPont y otras grandes compañías químicas no están invirtiendo mucho en esa dirección).
* Presentación: ¿puede verse tan bien como lo necesita para fines de marketing?
* Función: ¿Puede preservar los ingredientes tan bien como necesita (este es el desafío más difícil)? ¿Se derrite cuando está en contacto con agua caliente?
* Propósito: ¿De hecho se degrada? Si es así, ¿tiene un impacto significativo? La mayoría de los desechos están destinados a un vertedero, que no permite que los materiales (como un sándwich) se descompongan realmente. Entonces, ¿qué sentido tiene crear envases degradables para un uso generalizado cuando nuestro método de eliminación contrarresta la función para empezar?
* Disponibilidad: desde una vista de las materias primas y la fabricación, ¿qué sistemas deben estar en su lugar para producir a una escala lo suficientemente grande como para satisfacer la demanda? ¿Cuesta más? Si es así, ¿hay personas dispuestas a pagar por ello?
Nuestra compañía pasó por una línea de preguntas similar cuando estábamos investigando bolsas de café compostables. Conceptualmente, fue una obviedad para nosotros. Estábamos a punto de hacerlo, no pudimos (y aún no podemos) soportar la idea de que todas las bolsas de aluminio de alta barrera queden en la basura. Pero existen barreras tangibles, especialmente a la luz de la necesidad de una protección de alto rendimiento contra la oxidación para un producto gourmet. Por ejemplo, solo dos empresas en el mundo fabrican bolsas de café compostables de alta barrera. La presentación es bastante sólida, pero los costos mínimos y los costos de impresión fueron demasiado para nosotros (es cierto que esto podría cambiar si la tecnología se populariza). Pero, en última instancia, tuvimos que admitir que incluso si vendiéramos todo nuestro café en bolsas compostables / biodegradables, la infraestructura primaria de eliminación en el mercado no es compatible con su propósito y función.
En definitiva, la mayor parte del embalaje va a un lugar donde simplemente no puede degradarse. Entonces, a menos que haya más instalaciones de compostaje para cumplir con el propósito, casi no tiene sentido proporcionar envases biodegradables … aunque darles a las personas la opción es bueno. Pero, ¿es realmente tan convincente como para motivar a empresas como Nestlé? Yo creo que no.
