La respuesta, creo, es en algunas partes.
- Café: Después de mi computadora portátil, no hay nada que use más como estudiante que como café, aunque personalmente odio la mezcla de café que utiliza Starbucks. Es relajante, con cafeína y delicioso.
- En general son tranquilos y cómodos: cada café que he visitado ha tenido un ambiente agradable, ha sido bastante silencioso durante las horas no punta y tenía asientos cómodos en el salón.
- Hipster: a pesar de que a menudo se puede negar, a algunas personas les gusta que las vean trabajando, particularmente con actividades elegantes como estudiar o escribir, para parecer refinadas y cosechar los beneficios de esa reputación.
- Estereotipo: la imagen clásica de un estudiante es aquella que se encuentra en una biblioteca o en un café, rodeada de libros y papeles, trabajando en algo difícil y que cambia la vida, como una tesis. A la gente le encantan los estereotipos, especialmente los no negativos, y con frecuencia los emula.