Hay tantas respuestas excelentes para esta pregunta que intentaré no volver a exponer demasiado. Hacer cambios importantes en su dieta requiere un período de ajuste. Tan expertos en comida como nos gusta pensar que somos, la mayoría de la gente come aproximadamente las mismas cosas día tras día. Somos, después de todo, criaturas de hábito. Nuestros cuerpos están acostumbrados a satisfacer todas nuestras necesidades nutricionales de una determinada manera, en función tanto de los alimentos que consumimos habitualmente como de las porciones en que los consumimos. Es importante que durante esta revisión de su dieta realice un seguimiento de todas sus principales necesidades dietéticas: calorías, grasas, carbohidratos, sodio, proteínas, fibra dietética, vitaminas y minerales esenciales. Lo animo a probar una aplicación que lo ayude a administrar su dieta, como MyFitnessPal.com, que no solo cuenta calorías.
En lo que respecta a las sustituciones de trigo y lácteos, no es tan simple como buscar reemplazos directos como pan sin gluten y alternativas lácteas. El pan de trigo y la leche son alimentos muy complejos que proporcionan una gran cantidad de nutrientes complejos. Probablemente te sientas hambriento todo el tiempo porque a tu cuerpo le faltan los carbohidratos, la grasa, las proteínas y las calorías que proporciona la leche y el pan. Afortunadamente, hay muchas alternativas deliciosas y saludables que brindan estos mismos nutrientes esenciales. Lo animo a probar comidas llenas de vegetales frescos y proteínas magras (pollo, pavo y pescado) junto con granos complejos sin gluten como arroz integral, quinua y proteínas de amaranto y no animales como frijoles, lentejas y guisantes. Incluso los huevos y la carne magra pueden comerse con moderación. Elija grasas mejores para cocinar como el aceite de oliva y el aceite de coco. Coma cosas como nueces y aceitunas que también proporcionan mejores grasas para usted, aunque tenga cuidado de mantenerlas con moderación ya que tienden a ser altas en sodio. También busque hierbas y especias nuevas e interesantes para alegrar sus platos. La clave es elegir alimentos ricos en nutrientes y no simples carbohidratos y almidones que elevarán el nivel de azúcar en la sangre, lo que provocará un choque y lo dejará más hambriento de lo que estaba antes.
También animo a buscar libros de cocina que cumplan con sus restricciones dietéticas. Puede escoger y elegir recetas de muchas escuelas de pensamiento dietéticas diferentes: The Paleo Diet ™, The Whole30® Program, Veganism in a NuShell. De ninguna manera estoy respaldando ninguna de estas dietas como opciones de estilo de vida recomendadas. En mi opinión, cómo y qué comemos es muy personal y se basa en muchos factores (salud general, religión, ideología, ingresos, etc.). Depende de cada persona individual determinar la dieta correcta para ellos. Sin embargo, creo que los enlaces anteriores pueden conducir a algunas excelentes herramientas de recetas. También hay muchas culturas cuyas dietas principales no incluyen una gran cantidad de trigo o productos lácteos: la cocina india, la cocina china, la cocina africana, la cocina de Jamaica, por nombrar algunos.
La comida debe ser tan divertida como saludable y no quiero que te desanimes por los cambios que tienes que hacer, sino que trates de verla como una aventura en cocinas nuevas y exóticas.