Es innato en cada ser humano amar a las verduras. Es solo un caso de amor perdido para muchos de los no vegetarianos.
La gente ha estado demasiado lejos de la realidad de cómo crece un vegetal, para tocar / sentir el suelo donde crecen, la forma de cocinar.
En el mundo moderno, la propaganda es bastante fuerte para comer alimentos empacados y carnes. Vivimos en una ilusión de menos disponibilidad de tiempo, a pesar de los numerosos inventos. La ironía es que las máquinas están diseñadas para ayudarnos a tener más tiempo de ocio, pero es exactamente lo contrario de lo que sucedió y continúa así.
La gente está luchando en estos días con sus horarios agitados para incluso encontrar el tiempo para cocinar, otra ironía. Ganamos para alimentarnos, pero en cambio recolectamos y almacenamos, y cuando es hora de comer, muchos no tienen la pasión, los dientes ni la capacidad para digerir.
Sin volverme filosófico sobre esto, siento que a todos les gustan las verduras o, de hecho, cualquier cosa que esté tan estrechamente relacionada con la tierra. Nadie puede negar la mayor calma y paz experimentada en la naturaleza (sea en cualquier forma).
Por cierto, matar no es natural para los humanos, tampoco tenemos las garras o agallas para digerir carne cruda y definitivamente no es natural criar a los animales y sus crías para que sean empacados como jamones y filetes.
¡Comiendo feliz!…