Mi primera vez en China fue en Beijing. Recuerdo claramente tres de los primeros alimentos que probé:
1. Fideos: eran dulces y picantes con carne de cerdo, y deliciosos. Los tuve para el desayuno.
2. Pato asado de Beijing: fue preparado en el restaurante de patos más famoso de Beijing (Quanjude). Era suculento, crujiente, rico y lleno de sabores picantes. Fue realmente una experiencia de clase mundial.
3. McDonald’s: odio McDonald’s, y obviamente quería probar comida china en China. Pero mi anfitrión chino, tratando de ser cortés, quería darme “una muestra de hogar” y me llevó hasta aquí. Sabía que ella estaba siendo amable y educada, así que por supuesto le di las gracias, sonreí y actué como si fuera delicioso. Pero obviamente, estaba secretamente decepcionado.