La mayoría de las plantas tienen raíces que penetran profundamente en el suelo para absorber el agua y los minerales del suelo, el agua y los minerales que necesitan para la salud y la madurez.
Algunas de estas plantas tienen raíces subterráneas (zanahorias, salsifíes, rábanos) o bulbos / tubérculos-crecimientos carnosos adheridos a las raíces (papas, batatas, remolachas, cebollas) – que están destinados a almacenar agua y nutrientes adicionales para el uso de las plantas durante tiempos difíciles. A lo largo de los milenios, los humanos descubrieron que algunas de las raíces o tubérculos de estas plantas se pueden comer, proporcionándonos proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales que los humanos necesitan para prosperar.
