La mayoría de las frutas sin semillas se produce de la misma manera que otras frutas, que comúnmente se cultivan a partir de esquejes o injertos y no de semillas. Para hacer un corte, se corta una rama o una enredadera de una planta, se alimenta con una mezcla de nutrientes y se coloca en la tierra, donde se forman las hojas y las raíces. En un injerto, la rama, la enredadera o el brote crecen directamente en el tronco o raíz de otra planta. Con la excepción de las sandías sin pepitas, que tienen un método de propagación complicado, las frutas sin semillas no pueden reproducirse por sí mismas; deben injertarse cada vez.
La fruta sin semillas se originó a partir de mutaciones genéticas que los humanos descubrieron y cultivaron. Por ejemplo, las naranjas sin pepitas del ombligo datan del siglo XIX y un único árbol mutante en Brasil, cuya progenie proviene de yemas injertadas en otros árboles de cítricos.
Los científicos están trabajando continuamente para producir nuevas variedades de fruta sin semillas, ya sea mediante la reproducción de diferentes variedades juntas o mediante la estimulación de mutaciones genéticas. En los últimos años, han creado algunos cultivos de cítricos sin semillas al irradiar semillas de plantas, lo que causa mutaciones. Algunas de estas mutaciones son fatales para la planta, algunas son benignas; pero a veces estas semillas irradiadas producen una fruta adecuada sin semillas, y las plantas se propagan a través de la gemación.
Los investigadores pueden tener que mirar miles de plantas de semillero para encontrar una planta que no solo no tenga semillas sino que también sea atractiva para los agricultores y consumidores. David Ramming, un horticultor de investigación con el centro de investigación de USDA en Parlier, California, participó recientemente en la introducción de dos nuevas especies de uvas, Sweet Scarlet y Scarlet Royal. Él dice que el objetivo es crear fruta sin semillas resistente a las enfermedades que sabe bien y se puede cultivar en diferentes hemisferios. “Tenemos nuevas variedades en proceso todo el tiempo”, dice Ramming. “Estamos tratando no solo de tener una fruta sin semillas que sabe bien, sino de ponerla a disposición de los tenderos durante todo el año”.