Si está bien refrigerado, debería durar un día más o menos. Recuerde, el jugo de caña de azúcar cambia de color literalmente ante sus ojos. El jugo absolutamente fresco es muy verde y se oscurece muy rápido. El color oscuro no es una indicación de que esté dañado. ¡Solo el sabor te dirá cuándo “se fue”!
Bébalo mientras está fresco. Ahí es cuando sabe mejor.