¿Por qué comienzas el día con café y donas?

Yo no.

Comienzo el día con el cepillado dental … err, el cepillado de dientes … lo que sea y el espresso. Estoy omitiendo el otro “iniciador” del baño, pero en términos de despertarme y ponerme alerta, desterrar las bacterias del sueño y una sacudida del espresso más fino y fresco hecho a mano es un gran comienzo del día.

Compartir ese trago de espresso con mi amor es otra revelación, no se necesitan donas. 🙂

Si ella ve esto, sin embargo, seguramente preguntará POR QUÉ NO comenzamos el día con café y donas.

¿Por qué preguntas?

Yo no, como regla general. Comienzo la mañana con una taza de té de desayuno inglés, preparado fuerte, con una rodaja de limón y sin azúcar. Con yogur, con mayor frecuencia. Llanura de yogur con fruta fresca o seca, dependiendo de lo que tengo en la casa y un chorrito de miel. El café y una rosquilla es una indulgencia de la tarde en mi mente. Algo que tienes como un recogerme alrededor de las 3:00, después de que hayas terminado tu trabajo y diligencias y decidas que te mereces un regalo. Es un donut de tarta normal, o un buñuelo de chocolate glaseado, sin glaseado de color ni salpicaduras, ni nada de esas tonterías.

No deberías comenzar tu día con un café

Vea los motivos aquí http://www.lovegodblog.com/2017/

Cuando necesito comer en el camino a una cita temprana