Si su dieta consiste en una gran cantidad de carbohidratos refinados, como pan y pasta, y no contiene suficientes proteínas y grasas, es probable que sienta hambre, incluso poco después de una comida. Las proteínas y las grasas te ayudan a sentirte satisfecho por más tiempo, lo que reduce el hambre durante todo el día. Incluya proteínas y grasas saludables en cada comida: elija pescado, carne de ave, huevos, frijoles, legumbres, nueces y lácteos bajos en grasa como fuentes de proteínas sobre carnes grasas y procesadas, como salchichas o tocino. Las grasas saludables incluyen aguacate, aceite de oliva y nueces.
Pangs of Boredom
La próxima vez que piense que tiene hambre, pregúntese si está realmente hambriento o simplemente aburrido. Si estás hambriento físicamente, es posible que experimentes un zumbido en el estómago, dolor de cabeza o dificultades para concentrarte. Cuando estás hambriento físicamente, un filete o un trozo de pescado con un lado de verduras sonará atractivo. Si solo está experimentando un antojo, es posible que desee alimentos reconfortantes, como papas fritas o galletas, en lugar de una comida adecuada. La próxima vez que esté sentado y sienta hambre, trate de dar un paseo de 20 minutos o leer un libro de su autor favorito. Si eso te distrae de buscar un refrigerio, es probable que estés experimentando un deseo emocional.
Ve a ver tu doc
Si limpiar tu dieta y asegurarte de estar hidratado no es suficiente para combatir esos dolores de hambre, es posible que tengas una afección subyacente que te haga sentir hambre todo el tiempo. Columbia Health observa que un aumento del apetito puede ser causado por la diabetes, el hipertiroidismo, la enfermedad de Grave, la hipoglucemia y la ansiedad. Ciertos medicamentos, como los antidepresivos y los corticosteroides, también pueden causar aumento del apetito. Si le preocupa su apetito, comuníquese con su médico para descartar cualquier condición de salud.