El secreto es comer atentamente.
- No comas de pie, o mientras haces otras cosas. Siéntese en una mesa agradable y tranquila con su comida y sin distracciones (excepto, por supuesto, las otras personas que comparten la comida con usted).
- Tome pequeños bocados y mastique muy bien, hasta que la comida esté casi licuada. Piense en cómo la comida sabe y siente en su boca. A algunas personas les gusta contar la cantidad de veces que mastican: he oído hablar de un objetivo de 50 masticables por bocado, pero personalmente nunca he sido capaz de sostenerlo.
- Coloque su tenedor / utensilio para comer y tome un sorbo de agua entre cada bocado.
- No comas todo en tu plato; dejar algo atrás. Esto te ayudará a no comer todo antes que a ti y detenerte cuando hayas tenido suficiente.
Idealmente, se aburrirá de la nada al comer una gran comida de esta manera, y dejará de pensar en la comida como entretenimiento; en consecuencia, solo comerá tanto como lo necesite y no por diversión.
Este método no requiere comidas especiales o porciones medidas, pero puede volver loca a la gente que está a tu alrededor esperando que termines.