McDonald’s Frappé tiene un sabor nauseabundo, dulce y artificial.
Frappuccino de Starbuck, aunque todavía bastante dulce, tenía un equilibrio más sutil entre lo seco y lo amargo del café.
En la bebida de McDonald’s, la dulzura cubre el café, cubriendo por completo su sabor. En la bebida de Starbuck, lo complementa.
Mientras que los Frappuccino de Starbucks no son una experiencia gourmet, tienen un bouquet de gusto mucho más complejo que McDonald’s Frappé.
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