Sí, podrías. No hay nada abiertamente tóxico en él, pero tomaría MUCHO masticar y sus intestinos no disfrutarían del ejercicio. Tampoco hay mucha nutrición en eso.
Eso es mucho trabajo para trabajar. La cubierta de cuero tendría que cortarse en piezas de boca. El corcho se puede romper en pedazos lo suficientemente pequeños como para tragar y pasar a través del sistema digestivo.