Hacer inventario. Agregar 6% en peso de gelatina de hojas, disolver, llevar a ebullición. Enfriar, congelar hasta que esté parcialmente fraguado, cortar en cubos pequeños. Termina congelando. Coloque los cubos en un colador forrado con una gasa sobre un balde, déjelos en el refrigerador para que se derritan.
Este proceso aclarará cualquier líquido sin pérdida de sabor. Toma más tiempo, pero no tienes que cuidar una balsa de clara de huevo.