La atención al detalle y la apreciación de la química subyacente pueden ayudar mucho con seguir una receta y refinar. Por ejemplo, saber que aumentar el pH puede reducir la temperatura de las reacciones de Maillard lo ayudará a saber que puede cocinar a presión con bicarbonato de sodio para obtener un bronceado en un ambiente húmedo. Comprender las reacciones ácido-base te permitirá sustituir el suero de leche y el vinagre.
Gran parte de la cocina depende del conocimiento especializado, por lo que, si bien la habilidad química ayuda, no está completa. Del mismo modo, la biología y la comprensión de la mioglobina y los músculos pueden ayudar a cocinar la carne. La física puede ayudarlo a comprender la convección, placas de inducción y microondas.
El estilo de cocinar también importa. Un curry no es tan científicamente intenso como un soufflé.
Dicho esto, algunas personas buenas en química se quitan el sombrero de la ciencia en casa y no piensan en todo, así que no es necesariamente cierto.
Y como dijo Seain, el arte y la diversión entran en juego cuando se crea un nuevo plato.