En primer lugar, ¿por qué un restaurante de alta gama necesita atraer a un mercado más amplio?
Los productores de alta gama tienden a ir no por volumen, sino por los altos precios que pueden cobrar. La justificación de sus precios puede ser varias: comida, establecimiento, servicio, “experiencia del cliente”, etc., pero todos estos tienden a incurrir en altos costos.
Disminuir los precios podría atraer a más clientes, pero también podría llevar a la bancarrota a la empresa. O podría disminuir la calidad de los factores que le permitieron florecer, lo que llevaría a una caída en el mercado.
La expansión de las instalaciones podría permitir que se atienda a más clientes en un momento dado, pero primero tendría que determinarse que el personal y la cocina existentes podrían atender a más clientes. Hay restaurantes que funcionan bien con cinco a diez mesas y un solo servicio para la cena. La calidad de la comida y la experiencia es tal que pueden cobrar lo suficiente como para cubrir los costos y las ganancias.
Algunos restaurantes intentan responder a la pregunta abriendo sucursales o productos derivados. Esto puede funcionar, asumiendo muchas cosas, pero muchas cosas también pueden salir mal y arrastrar hacia abajo la instalación insignia.