Así que, antes de seguir leyendo, recuerde que no soy científico, simplemente le transmito lo que leí en Internet.
Según los investigadores dirigidos por el Dr. Seishi Shimizu, la cafeína, el azúcar y el agua interactúan a nivel molecular. Descubrieron que cuando se agregaba cafeína al agua, las moléculas se mantenían juntas. La adición de azúcar aumenta este efecto y une el azúcar con la cafeína. Debido a esto, el café desarrolla la “suavidad” que a menudo se describe.