Es un método en el que se controla con precisión la temperatura a la que se cocina la comida. Eso permite obtener el punto o la transformación de proteínas y grasas (cómo cocinar) para ser muy específico. No recocido, no subcocido. Dado que la transformación molecular es muy específica con la temperatura, también puede dejar que la comida dure más en ese estado sin cambiar la preparación.
Normalmente se logra con el uso de un baño de agua y un calentador de agua con control preciso. Coloque la comida en un recipiente sellado (sin aire o poco) y sumérjala durante el tiempo deseado.