¿Por qué no deberíamos comer sandía?

Definitivamente deberías tener sandía porque,

La sandía es una de las más bajas en calorías, solo 46 calorías por taza. Eso es más bajo que incluso las frutas “bajas en azúcar” como las bayas.

La sandía contiene:

Vitamina C, Vitamina A, Vitaminas B1, B5 y B6, Potasio, Magnesio, Licopeno, Cucurbitacina E, Citrulina.

Beneficios de la sandía:

1) ayuda en la hidratación

2) Ayuda a prevenir el cáncer

3) Ayuda a mantener el corazón saludable

4) Ayuda a prevenir la degeneración macular

5) Ayuda a aliviar el dolor muscular

6) Ayuda a mantener la piel y el cabello en buenas condiciones

7) Ayuda a mejorar la digestión

Las dietas ricas en licopeno pueden ayudar a proteger contra las enfermedades del corazón. Cáncer: como una excelente fuente de la potente vitamina C antioxidante y de otros antioxidantes, la sandía puede ayudar a combatir la formación de radicales libres que causan cáncer.

Se ha encontrado que consumir 30 mg o más de licopeno por día puede causar efectos secundarios. Esto incluye:

  • Alteración intestinal

El consumo excesivo de sandías ricas en licopeno puede causar síntomas como náuseas, vómitos, diarrea, hinchazón, gases e indigestión. Esto puede ser más serio para los ancianos, ya que sus sistemas digestivos son más sensibles debido a la edad.

  • Problemas cardiovasculares

La sandía contiene muy buenas cantidades de potasio. Tres tazas de sandía contienen aproximadamente 560 mg de potasio. Sin embargo, los niveles altos de potasio en la sangre pueden causar problemas cardiovasculares, como latidos cardíacos irregulares y pulso débil o ausente. Los niveles altos de potasio también pueden afectar el sistema nervioso y el control motor. Esto es aún más importante para aquellos que sufren de disfunción renal, ya que sus riñones no pueden eliminar el exceso de potasio.

  • Reacciones alérgicas

Algunas personas pueden desarrollar reacciones alérgicas al consumo de sandía, lo que puede provocar erupciones leves a graves, hinchazón facial o anafilaxia. Quienes padecen alergia al látex, las zanahorias o el pepino pueden ser más propensos a la alergia a la sandía.