La gente que tiene hambre, COME comida. La mayoría de las personas entiende que necesitan pagar dinero para comer alimentos. El aroma nunca se valora por separado: se supone que forma parte del precio que uno paga por la comida. Si uno tiene mucha hambre, el aroma se vuelve incidental, sin importar si está presente o no.
Quienes hablan de disfrutar indirectamente el aroma no tienen hambre en absoluto. Posiblemente están “totalmente hartos” en casa. Posiblemente ellos no comen comida. Posiblemente flotan en el aire y no necesitan energía para la perambulación. Seguro que viven en un mundo de ficción sin relación con el mundo real, y menos que nada por disfrutar de shingara kochuri phuluri phish phry pagando dinero … Tal vez sean poetas con inclinaciones metafísicas arcaicas … ¡quién sabe!
Para hacer una contra pregunta: ¿Alguna vez les preguntó a esos tenderos sobre su brillante idea? ¿O las personas que comen allí, qué tontas son para pagar dinero cuando uno puede disfrutar los aromas gratis? Si no lo hizo, debe preguntarle a los dos grupos lo antes posible. Las respuestas serán muy interesantes y muy esclarecedoras. ¡Puede desencadenar un debate nacional, ya que la pregunta tiene relevancia universal!