¿Creerías en los fideos orgánicos?

El consumo de alimentos cultivados orgánicamente es una gran manera de reducir su exposición a los contaminantes que se encuentran comúnmente en los alimentos que se han cultivado utilizando prácticas agrícolas convencionales. Estos contaminantes pueden incluir no solo pesticidas, muchos de los cuales han sido clasificados como posibles agentes cancerígenos, sino también metales pesados ​​como plomo y mercurio, y solventes como benceno y tolueno. Minimizar la exposición a estas toxinas potenciales es un beneficio importante para su salud. Los metales pesados ​​pueden dañar la función nerviosa, contribuir a enfermedades como la esclerosis múltiple e interferir con la producción de hemoglobina de una manera que aumenta el riesgo de anemia. Los solventes pueden dañar la función de los glóbulos blancos y disminuir la capacidad del sistema inmunitario para resistir las infecciones.