Bueno, me gusta Eisbein, mucho. Como solía hacer mamá.
No, no hay ni una gota de herencia alemana en ella. Más bien, los corvejones de cerdo y el repollo en escabeche también son chinos. Además, Blutwurst. Deliciosa variación en el mismo.
Por cierto, ¿sabías que los tibetanos tienen bagels?