Existen varias formas tradicionales de consumir pan rancio / sobrante, la mayoría de las cuales implica usarlo como ingrediente en otras recetas.
- Haga tostadas francesas: tome las rebanadas de pan y sumérjalas en huevos revueltos crudos hasta que estén saturadas. Fría en una sartén para cocinar los huevos. El líquido en el huevo ablandará el pan.
- Hacer budín de pan: Cortar el pan en cubos grandes o piezas de tamaño similar, poner en una fuente para hornear (sin embargo, esto suele requerir más pan que “las últimas rebanadas”). Haga una mezcla de crema de huevo, leche y azúcar, y vierta sobre el pan. Hornee hasta que esté cocido. Es como una tostada francesa tradicional horneada, semi-pasada por agua.
- Make a Strata: la misma idea que un budín de pan, pero sabrosa en lugar de dulce. Mezcle los trozos de pan con verduras cocidas / tocino / queso, vierta un flan sin endulzar y hornee hasta que estén cocidos.
- Haga migas de pan: Tome el pan sobrante que sobra, deposítelo en un procesador de alimentos y reduzca a una harina gruesa. Guarde en un frasco hasta que prepare mac & cheese, o pollo frito, o cualquier otra cosa en la que desee poner pan rallado.
- Haga crutones: corte el pan en cubos, tueste en el horno, mezcle con aceite, queso parmesano, sal y especias, y sirva en la ensalada.
- Úselo para espesar la sopa: al hacer una sopa, divida el pan en trozos pequeños y revuelva. Está bien si el pan se rompe más en la sopa, ya que lo está usando como espesante.
Algunas de las formas modernas de estas recetas tradicionales incluso exigirán que el pan se seque intencionalmente y se ponga rancio, ya que funcionan mejor que con pan fresco. Estoy seguro de que solo estoy tocando la superficie.