Primero, no te sientas mal por no querer un marido no vegetariano. Puede ser un gran problema de compatibilidad y no hay nada de malo en esperar algunas cosas de su futuro esposo.
Dicho esto, hágase las siguientes preguntas:
- ¿Qué tan fuerte se siente por el vegetarianismo?
¿Es esto algo que incluyes en tu identidad central como persona o eres vegetariano principalmente por tus padres?
- ¿”Miras” a las personas que comen carne?
¿Crees que las personas que comen carne son “asesinos”? ¿Crees que no es ético comer carne y estas personas deberían hacer un esfuerzo para alejarse de ella?
- ¿Le resulta difícil ver a las personas comiendo carne? ¿Estás disgustado por eso?
Esto es importante. Tu relación duraría toda tu vida. Si no puede soportar la vista de su marido comiendo carne, entonces es un GRAN problema.
- ¿Su esposo siente empatía o entiende por qué eres vegetariano?
Puede ser más fácil quedarse con alguien que sea más solidario de su elección. Por otro lado, si él va a burlarse de ti por ser vegetariano (no poco común), entonces tienes tu decisión.
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- ¿Qué tan no vegetariano es él?
¿Puedes resolverlo si es un tipo de 1 a 2 veces por semana? ¿Estará dispuesto a comprometerse también, al limitar su consumo?
Introspecta y habla con el chico que tus padres han elegido. Encontrarás tu respuesta.
Todo lo mejor.