Las hierbas y las especias agregan sabor y color a los alimentos, por lo que para obtener el mejor resultado, debes asegurarte de que esas cualidades permanezcan lo mejor posible:
- Almacene lejos de la humedad. La humedad no solo hará que su producto se agrupe, sino que también aumentará el riesgo de crecimiento de bacterias u hongos en sus especias y hierbas. Típicamente esto significa no almacenarlos cerca del fregadero o encima de la estufa donde van los vapores de agua.
- Cierre bien su paquete. Algunas especias son higroscópicas (atraen agua del aire circundante. Esto también ayudará a evitar grumos y todos los demás riesgos asociados con la humedad.
- Almacenar lejos de la luz del sol. La luz del sol afecta el color. Si almacena chiles o pimentón en la luz solar directa, la diferencia de color puede notarse después de un par de días. Desea almacenar sus especias lejos de la ventana de la cocina en algún lugar de un armario.
- Almacenar lejos del calor. El calor afecta no solo el color, sino también los aceites volátiles que dan sabor a las especias. Así que no guarde sus hierbas y especias cerca del horno, el microondas o la estufa.
- Almacenar lo menos posible. Cuanto más tenga, más tendrá que almacenar y mayor será la probabilidad de que la calidad se deteriore. Intente usar la mayor cantidad de especias frescas que pueda.
- Compre sus especias sin moler. Cuando muele especias, daña las células internas y aumenta la liberación de los aceites volátiles que dan sabor a las especias. Al moler justo antes de usar, usted limita la degradación del producto que almacena.