¿Es racional la aparente renuencia de muchas personas a consumir despojos?

Comer es un problema complejo. Desde un punto de vista nutricional y económico, tienes razón: evitar los despojos no es racional.

Pero la comida también es una experiencia placentera que se basa en y construye recuerdos, relaciones sociales y gusto. Es bastante probable que estos y otros factores como el remilgo entren en escena. En términos de utilidad social, evitar los despojos, especialmente si va a disgustar a los demás o a uno mismo, es perfectamente utilitario y racional.