Me encanta comer berenjenas, pero cada vez que las cocino, fritas, asadas o en el horno, terminan con la textura incorrecta. ¿Cuál es el secreto para cocinarlos adecuadamente?

Salarlos para que liberen su exceso de líquido es una necesidad absoluta. Usualmente los corté en lonchas largas primero, los salaba en ambos lados y luego los secaba. Es más fácil distribuir la sal de manera uniforme y moderada que tenerlos en cubos. Después de este proceso, suelo cepillarlos ligeramente con un poco de aceite de oliva. Esto ayuda a humedecer la berenjena y evitar el uso de exceso de aceite cuando los cocines.
Otra opción sabrosa que se utiliza en la cocina del Medio Oriente que no incluye el uso de sal, es hornear toda la berenjena (sin picar o pelar) en el horno. La piel exterior protege la carne para que el vapor del interior mantenga la carne agradablemente húmeda mientras se libera lentamente. La berenjena se cocinará una vez que vea que se ha derrumbado y ha perdido aproximadamente el 50% de su volumen. Esta forma de cocinar berenjenas se utiliza para preparar baba ganoush (hummus de berenjena), una salsa muy sabrosa cuando se combina con algunos otros ingredientes.
También he usado esta técnica para otras recetas y es muy versátil.

Por lo general, es necesario pelarlos, cortarlos, salarlos generosamente y dejarlos secar y liberar el líquido. Luego enjuague rápidamente, seque y prepare. Si no quieres pasar el tiempo extra de preparación, prueba con berenjena japonesa.